Por espacio de poco más de una hora y media y con un público maduro y entusiasmado por volver a ver en escena a glorias del dos por cuatro, fueron pasando clásicos de la obra de Salgán, sobriamente ejecutados por la orquesta comandada por César.
En distintos momentos de la noche los virtuosos bandoneones de Ernesto Baffa, Julio Pane y Néstor Marconi, quienes en distintas épocas pasaron por la orquesta de Salgán, se acoplaron con personales solos.
Con el típico sonido "Salgán" fueron pasando recordadas composiciones que marcaron la estética del eximio pianista como "Don Agustín Bardi", "Grillito", "A plazo fijo", "Entre tango y tango" y el solicitado "A fuego lento", que provocó una de las máximas ovaciones de la velada.
Pero uno de los momentos claves y sensibles de la velada fue la llegada al escenario del cantor popular Alberto Podestá quien a los 89 años interpretó con sapiencia, "La luz de un fósforo" y "Pedacito de cielo".
Y, como para que la fiesta fuese completa, apareció en el escenario el Quinteto Real (con su nueva formación encabezada por César Salgán y completada por Carlos Corrales en bandoneón, Julio Peressini en violín, Esteban Falabella en guitarra y Juan Pablo Navarro en contrabajo).
El Quinteto con el agregado de Marconi en bandoneón, le brindó un sentido tributo a De Lío, amigo y compañero de ruta de Salgán con quien compartió un fantástico dúo de guitarra y piano.
"Canaro en París", "Gallo ciego", "Ojos negros", "El entrerriano" y "El amanecer", fueron interpretadas por la formación que Salgán-De Lío impulsaron hace 53 años junto a Enrique Mario Francini en violín, Pedro Láurenz en bandoneón y Rafael Ferro en contrabajo.
fuente:telam.com.ar
En distintos momentos de la noche los virtuosos bandoneones de Ernesto Baffa, Julio Pane y Néstor Marconi, quienes en distintas épocas pasaron por la orquesta de Salgán, se acoplaron con personales solos.
Con el típico sonido "Salgán" fueron pasando recordadas composiciones que marcaron la estética del eximio pianista como "Don Agustín Bardi", "Grillito", "A plazo fijo", "Entre tango y tango" y el solicitado "A fuego lento", que provocó una de las máximas ovaciones de la velada.
Pero uno de los momentos claves y sensibles de la velada fue la llegada al escenario del cantor popular Alberto Podestá quien a los 89 años interpretó con sapiencia, "La luz de un fósforo" y "Pedacito de cielo".
Y, como para que la fiesta fuese completa, apareció en el escenario el Quinteto Real (con su nueva formación encabezada por César Salgán y completada por Carlos Corrales en bandoneón, Julio Peressini en violín, Esteban Falabella en guitarra y Juan Pablo Navarro en contrabajo).
El Quinteto con el agregado de Marconi en bandoneón, le brindó un sentido tributo a De Lío, amigo y compañero de ruta de Salgán con quien compartió un fantástico dúo de guitarra y piano.
"Canaro en París", "Gallo ciego", "Ojos negros", "El entrerriano" y "El amanecer", fueron interpretadas por la formación que Salgán-De Lío impulsaron hace 53 años junto a Enrique Mario Francini en violín, Pedro Láurenz en bandoneón y Rafael Ferro en contrabajo.
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